Un día Changó estaba sentado en su castillo muy molesto por la traición de su amante Ochún, quien estaba coqueteando con su hermano Oggún.
Un día empezó a seguirla y vio que se dirigía hacia la casa de Oggún.
Changó comenzó a correr tras ella, pero cuando llegó al río Ochún se había ido y volvió a su castillo.
La Caída de Orula
Un par de días más tarde Orula arrojó los oráculos para ver cómo estaba la situación.
Un día antes Orula se cayó y se lastimó en el patio de su casa.
Lo vio en los oráculos, pero no hizo ebbo (limpieza) para evitar la caída.
Cuando Ochún miró a Orula para registrarla con el oráculo, le dijo que tuviera mucho cuidado con el fuego.
El oráculo le dijo que hiciera un ebbo muy rápido para garantizar su seguridad.
Le dijo que Changó estaba en camino de guerra en su búsqueda.
Orula quiso levantarse pero no pudo. En ese momento Oshún se dio cuenta que Orula estaba teniendo problemas para levantarse.
Ella le preguntó si estaba bien y Orula le dijo a Ochún que tenía que hacer un ebbo, pero no podía caminar porque estaba con mucho dolor.
Ochún le dijo a Orula que no se preocupara, que iba a ir a buscar los elementos que necesitaba para hacer su ebbo.
Orula estaba muy agradecido de las acciones de Ochún. Al día siguiente ella pasó a ver cómo seguía Orula, le preguntó si tenía hambre y Orula respondió que sí.
Ochún le dijo que iba a hacer su plato favorito. Ella comenzó a cocinar unas gallinas, mientras que Orula se relajó en su silla.
Por otra parte, Changó preguntó a algunos hombres en el pueblo, si vieron a Ochún en algún lugar.
Ellos le dijeron que vieron a Ochún en la casa de Orula. Changó estaba lleno de rabia, se fue rápido con rayos y truenos a casa de Orula.
Orula se levanta
Changó no sabía que no era cierto, pero Ochún estaba en el patio de atrás agarrando hierbas para las gallinas.
En cuestión de segundos, toda la casa de Orula se prendió en fuego.
Changó satisfecho se marchó creyendo que había castigado a Ochún por su infidelidad.
Orula al ver la casa en llamas se olvidó de su dolor y de prisa salió de la casa viendo con horror.
Ochún al ver la casa en fuego recordó que Orula tenía dolor y no podía caminar bien.
Entonces corrió hacia el interior de la puerta trasera de la casa de Orula.
Ella fue de habitación en habitación gritando su nombre, entonces ahogada por el humo salió corriendo y llorando casi quemada por las llamas.
Ella salió gritando que Orula estaba dentro de la casa.
¿Quién levanta a Orula?
Cuando Ochún vio que Orula estaba bien, corrió hacia él y lo abrazó.
Le dijo que estaba preocupada de que algo le había sucedido.
Orula le dijo a Ochún que estaba bien y desde ese día él le dijo que siempre estarían juntos.
Orula le dijo que ella era la víctima y su comida, la gallina, siempre será compartida con Ochún y que siempre se le llamará Apetebí.
Donde quiera que Orula esté, Ochun tendrá la satisfacción de hablar junto a él.